Si te gusta cocinar, estos son los trucos para incorporar el vino en tus platos

0
537

El vino, considerado el más noble de los líquidos, es una joya versátil en la cocina. Más allá de su disfrute en copa, se ha convertido en un ingrediente destacado en innumerables recetas.

En este artículo, exploraremos la fascinante práctica del maridaje y los consejos esenciales para cocinar con este elixir, desmitificando la idea de que un vino para la cocina debe ser de baja calidad.

Maridajes de Excepción: El maridaje, tendencia en auge en las mesas argentinas, es un arte que requiere precisión y creatividad.

La elección del vino adecuado para cada plato se ha convertido en un desafío apasionante.

La armonía entre líquidos báquicos y creaciones gastronómicas seduce a los paladares sibaritas, quienes buscan el equilibrio perfecto entre texturas, aromas y sabores.

Tintos: Potencia y Sabor: Los tintos, enriquecidos por el paso por barricas de roble, aportan toques especiados, notas de vainilla, coco y madera.

Perfectos para platos a base de carnes, realzan el color y el sabor de salsas oscuras.

Importante tener en cuenta que al cocinar con tintos, las proteínas absorben parte del color y la astringencia, transformando la experiencia culinaria.

Blancos: Frescura y Acidez: Los blancos, poseedores de una acidez precisa, elevan ciertas preparaciones gastronómicas.

Ideales para salsas de crema, carnes blancas, pescados y mariscos, otorgan ese toque especial que realza el plato.

La elección del vino blanco dependerá del carácter de los sabores, desde un Sauvignon Blanc fresco hasta un exótico Gweurztraminer.

Vinos en la Cocina: Secretos Revelados: El vino, lejos de ser relegado a un rincón oscuro de la bodega culinaria, se convierte en un aliado fundamental.

Su versatilidad permite caramelizar, marinar y unir sabores de manera magistral.

Además, al estar compuesto principalmente de agua, aporta aromas, texturas y matices únicos a las recetas.

El Arte de Caramelizar y Marinar: El vino se erige como un maestro en la caramelización de jugos culinarios, enriqueciendo las salsas con un sabor profundo.

En el marinado, revela su capacidad para aportar aromas y suavizar sabores intensos, desplegando una danza de matices que culminará en un plato excepcional.

Recomendaciones Culinarias: Para aprovechar al máximo el vino en la cocina, cocinar a fuego lento es imperativo.

El fuego desmedido puede perjudicar las delicadas propiedades organolépticas. Además, es crucial permitir que el alcohol se evapore, potenciando y reduciendo los sabores. Un mínimo de quince minutos en el fuego es esencial.

En cocciones cortas, reducir el vino en una olla aparte garantiza un resultado óptimo.

Vinos Fortificados: El Toque Mágico en Postres y Platos Principales: Los vinos fortificados, enriquecidos con alcohol vínico, despliegan su magia en postres y platos principales.

Desde el dulce Oporto tinto hasta el aromático Marsala, cada variedad aporta una dimensión única a las creaciones culinarias.

Un toque de nostalgia y sabor a los buenos tiempos en casa de los abuelos.

El vino, más allá de ser un acompañante, se convierte en un ingrediente estrella en la cocina.

La elección precisa, la técnica adecuada y el respeto por sus propiedades transforman cada plato en una experiencia sensorial inolvidable.

Disfrutarlo solo, maridado o como componente esencial en la preparación culinaria es un tributo al arte de la gastronomía.

Simone Chietti - Especial para El Malbec

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí