El sommelier Pablo Rodríguez Mezzetta eligió tres para que tengas en cuenta a la hora de comprar.
A pesar de las dificultades que generó la pandemia, la industria vitivinícola no se detuvo y, además de ser protagonista de “la mejor vendimia de los últimos 50 años”, siguió dándonos muy buenos vinos, tanto de ésta como de cosechas anteriores.
Desde el 13 de marzo pasado al día de la fecha muchas cosas han cambiado.
Pasamos por un periodo inicial de aislamiento voluntario durante unas semanas a volver con relativos cuidados a lo más parecido a una “nueva normalidad”.
Son tiempos de aflojar el pie del acelerador de las antiguas rutinas, de tener conciencia de cuidar al otro y sobre todo de adaptación.
Y si hablamos de adaptación, la gran mayoría de las bodegas descansaron un tiempo y luego buscaron rápidamente formas de reinventarse.
Tanto en venta online como con el aporte de creatividad a la hora de realizar actividades a distancia a través de Internet.
Pero no todo es comunicación. Los enólogos no descansaron, y este periodo tan peculiar fue aprovechado para lanzar nuevas etiquetas al mercado.
¿Vemos algunas de ellas?
Cerro del Toro Merlot Reserva 2019 | Bodega Cerro del Toro
Si hay alguien que no descansa es el equipo de esta joven bodega de Piriápolis.
En este caso se trata de una de las cepas que se cultiva en grandes volúmenes en nuestro país, para darle una nueva pincelada de estilo.
Hablamos de una interesantísima versión de Merlot de gran concentración de color y una buena potencia de aromas dominando principalmente frutillas y ciruelas maduras con un fondo levemente herbal.
La boca tiene un juego interesante entre la frescura de un Merlot joven y la sutil complejidad aportada por un leve toque especiado, aportado por el pasaje por roble francés de solamente el 10% del vino.
Un debut con muy buena nota, y a tenerlo en cuenta para hacerle seguimiento en los próximos años.
La Concordia Lote 28/29 Tannat Marselán 2018 | Campotinto
Y si hablamos de alguien que no para de trabajar, ese es Daniel Cis Godoy.
A principios de junio salió al mercado con la firma de ese enólogo carmelitano este bello corte de nuestra principal variedad junto con la cepa tinta que está siendo furor en los últimos años: el Marselán.
La uva utilizada proviene de los viñedos situados en el barrio privado La Concordia desarrollado por la bodega Campotinto, también ubicado en Carmelo.
El resultado final: vino de alta concentración de color y aromas de mucha intensidad, que van de ciruelas maduras y mermelada de arándanos a toques levemente especiados, mientras que en el sabor es potente y jugoso a la vez con larga persistencia, de buena proyección en el tiempo.
Sin dudas, el mejor blend de Tannat y Marselán que he probado hasta el momento en nuestro país.
Sobrenatural 2020 | Familia Dardanelli
La felicidad que me produce ver el avance y desarrollo de bodegas como Familia Dardanelli en tan poco tiempo, no tiene medida.
Hace pocas semanas apareció esta novedosa y misteriosa etiqueta en el mercado (misteriosa por no indicar de que variedades está compuesto, ya que no es ése el objetivo aunque se puede deducir una buena presencia de Cabernet Sauvignon), dando un paso adelante por primera vez en la bodega a intentos de elaborar vinos con menos intervención en el proceso.
En este caso, ese primer paso se inicia con la no utilización de sulfitos agregados (el conservante natural autorizado para los vinos).
Un vino correcto de punta a punta sin sobresaltos. Prolijos y constantes aromas de fruta roja fresca como frutillas y cerezas, sabor jugoso con persistencia del perfil frutal nombrado antes, y un final corto pero con contundente.
En resumidas cuentas, Dardanelli aprueba de muy buena manera esta primera incursión en los vinos sin sulfitos agregados.
¿Habrá un siguiente paso a futuro? ¿Un vino sin sulfitos agregados y con levaduras nativas quizás?
Fuente: Bodegas del Uruguay
