La maison Chanel acaba de lanzar al mercado un vino blanco y un rosado orgánicos que se produce en la isla de Porquerolles en Hyères.
En octubre de 2019, la marca compró la finca vinícola Domaine de l’Ile en la isla de Porquerolles, en el sur de Francia.
Actualmente, los hermanos Alain y Gerard Wertheimer son los dueños de Chanel y también cuentan con viñedos en Provenza y California.
La Domaine se encuentra en la llanura de Notre-Dame y Brégançonnet, en una parte apartada de la isla donde las vides y los olivos están protegidos del aire salado del mar.
Las variedades de uva mediterránea tradicional cuidadosamente seleccionadas llevan el carácter único del sur. Por lo tanto, sabemos que los sabores de los vinos no decepcionarán.
Los vinos los elaboró el reconocido winemaker Nicolas Audebert, gerente de Château Rauzan-Ségla en Margaux y Châteaux Canon y Berliquet en Saint-Emilion, otras propiedades vinícolas de Chanel, según publica la revista Elle.
El experto en vinos creció en la misma isla de Porquerolles y es responsable de los departamentos de vino de Chanel en Château Rauzan-Ségla en Margaux y Châteaux Canon y Berliquet en Saint-Emilion.
En 1957, este terroir fue heredado por las hermanas Fournier. Una de ellas Lélia Fournier, esposa de esposa Le Ber, defendió sus tierras y plantó viñedos. Ahora heredados por Sébastien, éste le confió el viñedo a Chanel.
Los vinos
El vino blanco (Domaine L’Ile Blanco 2019) tiene un sabor a fruta blanca madura con matiz floral y una variación de notas secas pero es fresco. Está compuesto por 20% Grenache, 20% Syrah, 17% Cinsault, 13% Mourvèdre, 9% Tibouren, 21% Rolle.
El vino rosado (Domaine L’Ile Rose 2019) está hecho con 28% Grenache, 24% Syrah, 21% Cinsault, 16% Mourvèdre, 11% Tibouren.
Es un vino fresco con un toque de melón y fruta fresca. Tiene un aroma es enriquecedor y realzado con notas delicadas y brumosas de flores blancas. En boca, el vino revela su plenitud y su salinidad.
Dolce & Gabbana lanzó recientemente un vino con un fin solidario para ayudar a la economía siciliana.
La empresa de moda italiana se unió la bodega de vinos de Sicilia, Donnafugata, y diseñaron un vino que dieron en llamar “Rosa”.